La escuela se ha reactivado en todo el país y ahora es un buen momento para hablar con sus hijos sobre la seguridad en el hogar. Ya sea saber cómo operar el sistema de seguridad de su hogar o saber a quién llamar para pedir ayuda cuando sea necesario, es crucial que los niños conozcan estos datos básicos para ayudar a que ellos y sus hogares sean más seguros.

Asegúrales a tus hijos que están a salvo. Los niños más pequeños pueden pensar que si está comprando un nuevo sistema de seguridad significa que antes no estaban seguros o que hay peligro que temer. Asegúreles a sus hijos que su hogar es seguro y seguirá siéndolo, más aún ahora que cuentan con la protección adicional que brinda un sistema de seguridad para el hogar. Dependiendo de la edad y la personalidad de sus hijos, es posible que desee evitar hablar de «chicos malos» y concentrarse en cómo el sistema de seguridad está destinado a mantener a la familia a salvo.

Establezca reglas básicas claras. Dependiendo de la edad de sus hijos, infórmeles sobre las reglas y responsabilidades que tienen para la seguridad en el hogar. Los niños de 2 a 4 años deben saber, por ejemplo, que solo los adultos pueden abrir la puerta sin importar quién toque. Enseñe a sus hijos a usar un teléfono para llamar al 911 y a adultos de confianza en caso de emergencia, y tenga los números fácilmente legibles y accesibles. Se debe enseñar a los niños mayores y adolescentes sobre la importancia de armar el sistema de seguridad cuando están solos en casa, quién puede estar en la casa cuando los padres no están y cuando se establecen toques de queda. Enséñeles que estas reglas son inflexibles y que están establecidas por una razón: para mantenerlos a salvo.

Aborde las preocupaciones de privacidad desde el principio. Los adolescentes quieren privacidad cada vez más a medida que crecen, y pueden irritarse ante la idea de cámaras de seguridad ubicadas en el hogar. Tranquilícelos diciéndoles exactamente qué grabarán las cámaras: la entrada de la puerta principal, el garaje, cualquier objeto de valor estacionario en la casa, etc. Asegúrese de que sepan que las cámaras no están allí para «espiar», sino por seguridad.

Involucre a sus hijos mayores. A medida que sus hijos crezcan, muéstreles cómo funciona el sistema de seguridad de su hogar y enséñeles cómo operarlo ellos mismos. Asegúrese de que conocen las contraseñas necesarias para evitar falsas alarmas y enséñeles cómo armar y desarmar el sistema. También es una buena idea inculcar buenos hábitos cuando se trata de bloquear siempre las puertas y armar el sistema cada vez que salen de casa. Los niños mayores deben saber que mantener el hogar seguro ahora es parte de sus responsabilidades a medida que se hacen adultos. Cuanto más maduros sean, más deberían saber sobre las amenazas muy reales que existen en el mundo. pero no de una manera que los haga temerosos o paranoicos.

La clave para hacer que su hogar y su familia sean más seguros es más que solo hardware: es una conversación continua sobre la importancia de la seguridad y la vigilancia en el hogar.